Buda Shakyamuni y Dos Fundadores

Buda Shakyamuni

Shakyamuni Buddha

Shakyamuni a veces es llamado “Shakuson”, que es una abreviatura de “Shakyamuni” (Sabio de la tribu de los Shakya) y “Seson” (Honrado por el mundo).

El Buda nació como un príncipe en la tribu Shakya hace aproximadamente 2500 años, en un pueblo llamado Lumbini, localizado en el actual Nepal. Su nombre de familia era Gautama, y se le llamó Siddhartha. Como príncipe tuvo una afortunada vida de riquezas. No obstante, estaba muy perturbado por los problemas de su vida y abandonó el hogar cuando tenía veintinueve años para convertirse en monje. Luego de seis años de prácticas ascéticas, realizó la Vía a la edad de 35 años, en Bodhgaya. En ese momento se convirtió en El Buda (El Iluminado). A partir de entonces expuso diversas enseñanzas ejemplificadas por la ley de causalidad, la impermanencia de todo / todas las cosas carecen de identidad fija, la paz y la tranquilidad del nirvana y el sufrimiento inherente a toda existencia.

Luego de su realización y hasta su muerte en Kushinagara, el Buda continuó sus viajes para predicar el Buda-Dharma mientras también apoyaba a sus discípulos. La imagen principal de la Escuela Soto es el Buda Shakyamuni. Gracias a que el Buda Shakyamuni realizó la Vía y compartió aquellas enseñanzas, las cuales fueron a su vez transmitidas de manera exacta a través de sucesivas generaciones por sus discípulos, en la actualidad también podemos encontrar el Buda-Dharma.

Podemos manifestar la compasión, la sabiduría y la dicha del Buda en nuestro cuerpo y mente, venerando al Buda Shakyamuni como nuestra imagen principal junto con los tres tesoros (Buda, Dharma y Sangha) y viviendo con esfuerzo justo, basándonos en sus enseñanzas.

Dogen Zenji

Dogen Zenji, el fundador de la escuela Soto Zen, así como de Daihonzan Eiheiji, nació el 26 de enero de 1200 de la era moderna. Esto corresponde al período Kamakura de la historia de Japón, el año siguiente a la muerte de Yoritomo Minamoto. Se dice que su padre era Michichika Koga, un ministro del gobierno y que su madre era Ishii, la hija de Motofusa Fujiwara. Presumiblemente, el joven Dogen Zenji tenía una vida confortable. Sin embargo, a la edad de trece años, escaló al monte Hiei y al año siguiente se afeito la cabeza y se hizo monje. Se dice que se convirtió en monje porque sentía lo efímero del mundo en la muerte de su madre cuando tenía ocho años.

Sin embargo, el monte Hiei en esa época, según se refleja en los ojos de Dogen Zenji, estaba en decadencia por sus conexiones con la gente en el poder. Entre los sacerdotes había mucha avaricia mundana por fama y riqueza.

Decepcionado, Dogen Zenji dejó el monte Hiei en busca del verdadero Dharma (las verdaderas enseñanzas del Buda). Visitó templos en muchos distritos diferentes, considerablemente confundido y agitado. En el Shobogenzo Zuimonki, se cita a Dogen Zenji diciendo: “Fui incapaz de encontrar a un verdadero maestro o buenos amigos del Camino y, consecuentemente confundido, surgieron malos pensamientos. Sin embargo, cuando supe de la existencia de monjes eminentes en el pasado, me di cuenta de que esos pensamientos eran despreciados y odiados por aquella gente. Así, cambié mi modo de pensar, comprendiendo que debía pensar en mis eminentes predecesores, los grandes sacerdotes de China e India, más que en los monjes de Japón”.

Cumpliendo con su palabra, viajó en barco a China a la edad de 24 años en busca del verdadero camino del Buda. Tampoco en China había maestros que pudieran satisfacer los ideales puros de Dogen Zenji. Sin embargo, cuando estaba a punto de regresar a Japón, conoció a Nyojo Zenji en el monte Tendo, donde halló práctica verdadera centrada en el zazen.

“Me senté en zazen día y noche. Cuando hacía muchísimo calor o frío, muchos de los monjes interrumpían la práctica por un rato por miedo a enfermarse, en ese momento pensé para mi mismo: “No estoy enfermo y, si no practico, entonces, el haber venido hasta China habrá sido en vano. Morir de enfermedad debido a la práctica, estaría de acuerdo con mi deseo original”, y así, continué sentado” (Shobogenzo Zuimonki). Hasta este punto se dedicó Dogen Zenji a la práctica del zazen. Muchos monjes japoneses que han ido a China a estudiar y practicar, han regresado con un montón de sutras budistas a su regreso a Japón como recuerdo, pero Dogen Zenji regresó con las manos vacías. La única cosa que Dogen Zenji trajo consigo, fue el haber hecho suya la enseñanza del shikan-taza (la práctica de sólo sentarse).

Para animar al mayor número de personas a practicar zazen, Dogen Zenji escribió el Fukan-zazengi (Principios universales de Zazen), en la que cuidadosamente explicó el significado del zazen y la manera de practicarlo.

También escribió el Bendowa (“Una consideración al reconocimiento de el Camino”), en un formato de preguntas y respuestas en el que enseña que la práctica del zazen es el verdadero camino del Buda. En su obra más representativa, Shobogenzo (“El Tesoro del verdadero ojo del Dharma”), que se extiende en más de noventa capítulos, Dogen Zenji transmitió completamente la mente de un despertar espiritual.

En 1243, a la invitación de su colaborador Yoshihige Hatano, Dogen Zenji dejó Kyoto y se trasladó a las montañas de Echizen. Se dice que este traslado fue debido a la presión de los sacerdotes del monte Hiei, pero también es cierto que dejó Kyoto por el consejo de Nyojo Zenji de “vivir en el interior de las montañas y en los valles apartados, protegiendo las enseñanzas del Buda y de sus antepasados”.

En 1244, el monasterio que había sido fundado por Yoshihige Hatano, fue completado. Al principio se le llamó Daibutsuji, y el nombre fue cambiado posteriormente a Eiheiji. Este es el actual Daihonzan Eiheiji.

Fue aquí que Dogen Zenji continuó con la estricta práctica mientras adoctrinaba a sus discípulos. En 1253, enfermó y falleció a la edad de 53 años.

Keizan Zenji

Después de Dogen Zenji, la lámpara del Dharma fue transmitida a Ejo Zenji y luego a Gikai Zenji, pasando posteriormente a Keizan Zenji que fue el cuarto descendiente en el linaje japonés del Soto Zen.
Keizan Zenji nació en 1264 en la provincia de Echizen, que corresponde a la actual provincia de Fukui. Su madre, Ekan Daishi, era una creyente devota de Kannon Bosatsu (Avalokiteshvara), el bodhisattva de la compasión. Se dice que se dirigía a rezar en el edificio dedicado a Kannon cuando dio a luz, razón por la cual, el nombre que se le puso a Keizan Zenji en su nacimiento fue “Gyosho” (Vida-Práctica).

A la edad de ocho años, se afeitó la cabeza y entró en Eiheiji, donde comenzó su práctica con el tercer abad, Gikai Zenji. A la edad de trece años, regreso para vivir en Eiheiji, y fue ordenado oficialmente como monje por Ejo Zenji. Después de la muerte de Ejo Zenji, realizó sus prácticas con Jakuen Zenji en Hokyoji, situado donde hoy es Fukui. Observando la habilidad potencial de Keizan Zenji para liderar a los monjes, Jakuen Zenji le seleccionó como ino, el monje a cargo de la práctica de los demás monjes.

A diferencia de Dogen Zenji, que exploró profundamente el yo interior, Keizan Zenji destacó por su habilidad de mirar al exterior y difundir audazmente sus enseñanzas. Para la Escuela Soto Zen, las enseñanzas de estos dos fundadores están conectadas estrechamente entre sí. Al difundir el Camino del Buda de manera amplia, una de ellas le da un enfoque interior, mientras que la otra, es exterior.

Después de varios años más de práctica en Kyoto y Yura, Keizan Zenji se convirtió en sacerdote residente de Jomanji, en la provincia de Awa (actual provincia de Tokushima). Tenía 27 años. Durante los siguientes cuatro años, dio los preceptos budistas a más de setenta laicos. De esto podemos entender el voto de Keizan Zenji para liberar a todos los seres por medio de la enseñanza y la transmisión del Camino.

También insistió en la igualdad entre hombres y mujeres. Promocionó activamente a sus discípulas para que se convirtieran en sacerdotisas residentes. En una época en que las mujeres eran marginadas injustamente, esto era algo realmente novedoso. Se cree que éste es el origen de la organizaión de las monjas de la escuela Soto Zen y razón por la que muchas mujeres tomaron refugio en el Buda, Dharma y Sanga.

Keizan Zenji regresó finalmente a Daijoji, en lo que hoy es la ciudad de Kanazawa, donde se convirtió en el segundo abad, después de Gikai Zenji. Fue aquí donde dio teisho sobre Denkoroku (Crónicas de la Transmisión de la Luz). Este libro explica las circunstancias por las cuales el Dharma fue transmitido desde el Buda Shakyamuni a través de los veintiocho antepasados en India, los veintitrés patriarcas en China, a través de Dogen Zenji y Keizan Zenji en Japón, hasta el maestro de Keizan, Tettsu Gikai.

En 1321, a la edad de 58 años, un templo llamado Morookaji en Noto, (actualmente la provincia de Ishikawa) fue donado a Keizan Zenji, que lo renombró a Sojiji. Este fue el origen de Sojiji en Yokohama, que es, junto con Eiheiji, el otro Daihonzan (templo principal) de la Escuela Soto Zen.

Keizan Zenji, bajo ningún concepto dejó de dar importancia a los intereses mundanos de la gente común, y junto con la práctica del zazen, utilizó la oración, los rituales, y los servicios conmemorativos para enseñar. Esto era atractivo para mucha gente y les dio una sensación de paz. Por esta razón, la Escuela Soto Zen se expandió rápidamente.

Incluso hoy en día en la escuela Soto Zen, a la vez que todos los templos tienen grupos de zazen a los que servir en sus serias peticiones, también hacen lo posible para satisfacer las peticiones de mucha gente para el beneficio del mundo diario, que incluye servicios conmemorativos y funerales.

Keizan Zenji murió en 1325 a la edad de 65 años. En los años sucesivos, sus discípulos realizaron un gran trabajo sustituyéndole en Sojiji en la península de Noto. Sin embargo, ese templo fue pasto de las llamas en 1898. Esto brindó la oportunidad en 1907 de trasladarse a Sojiji, a su localización actual. El antiguo templo fue reconstruido como Sojiji Soin, y continúa, aún hoy, albergando a muchos creyentes y partidarios.


Fuente https://global.sotozen-net.or.jp/spa/what/Buddha_founders/dogen_zenji.html